martes, 18 de junio de 2013

SZAMANKA

FICHA TÉCNICA






Título original: Szamanka (Chamanka)
Año: 1996
Duración: 110 min.
País:  Polonia
Director: Andrzej Zulawski
Guión: Manuela Gretkowska
Música: Andrzej Korzynski
Fotografía: Andrzej Jaroszewicz
Reparto: Boguslaw Linda, Iwona Petry, Agnieszka Wagner
 
 
 SINOPSIS
 
Szamanka es un controversial retrato de la brutalidad, el sexo, la pasión, la obsesión y la locura. Cuenta la historia de Michal, profesor de antropología en Varsovia, quien en el desarrollo de la investigación de su tesis doctoral se obsesiona crecientemente con un chamán momificado y con la bella, enigmática, sexualmente voraz y violentamente perturbada estudiante de ingeniería conocida como “la italiana,” a quien conoce cuando busca un departamento en el cual quedarse. Desde ese momento, la vida de Michal se volverá progresivamente caótica. (FILMAFFINITY)




PRIMER ENCUENTRO


El primer encuentro de nuestros protagonistas surge de manera casual, "la italiana" busca un apartamento donde alojarse y el hermano de Michal alquila uno. Se ve a los hermanos colgando carteles donde anuncia el aquiler, el hermano de Michal es cura y decide irse, sin más, en ese momento no da mayor explicación. Ponen un cartel en la estación de metro donde se cruzan con la joven protagonista, ésta  arranca el cartel donde se anuncia el piso en alquiler y comienza a perseguir por la calle a Michal interrogándolo, le pregunta una y otra vez cuánto cuesta, tras la persecución y escuetas explicaciones, llegan al apartamento.


Este primer encuentro es de vital importancia, se puede decir que resume toda la película, ya tenemos a todos los protagonistas y también el principal escenario. El encuentro, el apartamento en  aquiler, las sábanas sobre los muebles, puede llegar a recordar a "El último Tango en París". En cualquier caso nos sirve para desvelarnos una parte importantísima sobre la personalidad de ambos protagonistas. La chica se muestra como una joven de caracter peculiar, es obsesiva, incluso puede decirse que infantil, dada la insistencia que muestra por el apartamento. Trata de resultar simpática con Michal, pero éste rápidamente interrumpe su insulsa conversación. Sale el depredador que lleva dentro y sin miramientos comienza a desnudar a la joven, mete su mano entre las piernas y le suelta con desprecio: "Mírate, estás mojada"


En este punto conviene recordar que apenas han transcurrido 5 minutos de metraje, así pues, es bastante significativo el comportamiento de ambos. La joven no muestra rechazo al desconocido ante tal situación, tampoco da muestras de gustarle, en principio. Y digo en principio porque tal vez sea producto de mi imaginación, y tras haber visto con detenimiento la película y el episodio de revelación de Michal que comentaré más tarde, parece que tras la eyaculación del hombre, la joven parece sentirse satisfecha, deseosa y cada vez más hambrienta y necesitada de Michal.


La cara de satisfacción corresponde a momentos después que Michal haya terminado, como si en el interior de su cuerpo tuviera un detector y hubiera dado positivo con el esperma del tipo hombre que anda buscando. Terminado el "encuentro" comienza la charla típica, "Tengo novia", "Soy antropólogo" ... Pero a la joven parece no importarle, se dedica a seguirlo, a toquetearlo por la calle, a provocarlo. Él, por su parte, una vez ha saciado su primer impulso se comporta de manera más convencional, maneras que conforme avance la película serán cada vez menos frecuentes. Michal es el personaje que más transformación sufrirá.






LA ITALIANA


La italiana, así se hace llamar nuestra protagonista, al principio de la película da una breve explicación del por qué del sobrenombre, trabajó de camarera y hacía unas pizzas muy ricas. Es curioso, en imdb viene que se llama Wolzska, aunque haciendo memoria, no hay un solo momento de la película donde alguien pronuncie su nombre. Así que en princpio resulta difícil conectar con el personaje, tal vez sea una estrategia del director para aumentar el halo de misterio que rodea una historia tan peculiar, o tal vez sea para resaltar que se trata de una chica que es ninguneada y menospreciada allá por donde pasa, o simplemente porque no tiene importancia. La historia tiene dos grandes protagonistas, por un lado nuestra italiana, una joven de veintipocos años, de una belleza sutil y enigmática, estudiante de algún tipo de ingeniería. Y por otro , Michal, El Antropólogo, protagonista masculino y del que más adelante daremos cuenta.


Su manera de caminar, su manera de vestir, de hablar, de comportarse, todo en ella puede llegar a ser irritante. Tal vez por esa razón, pese a ser una mujer atractiva, recibe más muestras de repulsa que de cariño por parte de todo el mundo, tanto de desconocidos como de familiares. Esa manera de comportarse puede ser debida a un pasado demasiado tormentoso pese a lo joven que es. Vemos que visita la casa de su madre en su barrio marginal de Varsovia y presenciamos una escena muy descriptiva. La mujer se alegra que se vaya, la ve como una fuente de problemas, como un peso que ha estado soportando tiempo, La italiana por su parte, responde destrozando su habitación y recriminándole cosas a su madre. Un detalle significativo, en la familia también hay un niño pequeño, no sabemos de quién es hijo (tal vez de la italiana, tal vez de su madre, no lo sabemos) Pero mientras escucha a las dos mujeres discutir airadamente y destrozar la habitación, no deja de canturrear, lo que nos dice que no es una situación nueva. Está acostumbrado a los gritos y las discusiones.














Su madre es también una mujer joven, con un pasado que tampoco debe haber sido mucho más feliz que el de nuestra protagonista. Maltratada por su anterior marido y condenada a llevar una vida que detesta. No obstante, pese a la exclusión social que sufren, hay un familiar de la joven que la ayuda. No por gusto, la chica es arrastrada del pelo a una fábrica de carne propiedad de un familiar suyo, donde la obliga a trabajar para ganarse la vida y pagarse los estudios. La ayuda, como bien dice el propio famliar, es porque se ve en la obligación, no por cariño, no por amor, si no porque "hay que ayudar a la familia". Así pues, las relaciones personales de la italiana son un desastre, se ha ido de su casa, alejándose de una madre que se desentiende de ella, trabaja para un familiar que la menosprecia, y el supuesto novio que tiene tan solo la abre de piernas de vez en cuando. Es un joven estudiante de medicina que trabaja en un hospital junto con religiosas, haciendo prácticas y con mayores aspiraciones. En su defensa, hay que decir que la italiana tampoco muestra el más mínimo interés de satisfacer a su pareja, se limita a pedirle dinero y a decirle que no goza sexualmente con él.




EL ANTROPÓLOGO


Michal, un antropólogo que da clases en la universidad y que prepara su tesis doctoral, trabaja en el grupo de investigación liderado por el padre de su novia, está prometido, pronto se casará. Como la joven, también tiene un pasado tormentoso donde era maltratado y las esperanzas eran escasas. El hecho que haya salido del atolladero se lo debe a su hermano cura, como bien indica el protagonista. En cualquier caso, es el personaje que más transformación sufre a lo largo del film. De una vida más ordenada y convencional pasa a tener episodios de locura, una locura que parecía adormecida en su persona y que por una serie de acontecimientos parece renacer de su interior. Cronológicamente hablando, el primer hecho que parece augurar el cambio es el encuentro con la italiana. Con ella da rienda suelta a su apetito sexual, no necesita seducirla, no necesita complacerla, tan solo la utliza para su propio placer cuando y como le apetece. Ella disfruta de esa situación, siente la necesidad de verse dominada por Michal, y él cada vez parece gozar más con la joven. Le gusta verla en situaciones difíciles, como cuando la obliga a escupirle a la cara en medio de la calle. La joven cumple la orden y escupe en la cara de Michal, luego la obliga a lamer la saliva de su cara.


El segundo acontecimiento que parece desestabilizar por completo a Michal es el hallazgo de un chamán momificado. El estudio del chamán es su vida, a ello dedica cada minuto de existencia, comienza a pensar como él, comienza  a actuar como lo haría él. Le fascina el mundo espiritual en el que vive, lo concibe como el inicio de la religión. Conforme avanza la película y va averiguando más cosas sobre la momia y su vida, comienza a abandonar su vida anterior para acercarse más a las prácticas chamánicas. En un palabra, se convierte en su obsesión.





EL CÍRCULO DE LA LOCURA



Así pues se establece entre los principales personajes un círculo vicioso del que es imposible salir, La italiana está obsesionada con Michal, depende de él, nunca se separará de su lado ni condenará ninguna de las cosas que le obliga a hacer, vive una situación de esclavismo necesario. La obsesión de Michal es el chamán, cuanto más lo estudia, cuanto más averigua sobre él, más le fascina su mundo, y por otro lado asistimos a un episodio psicótico que es el desencadenante de una serie de sucesos que truncan la vida de todos los protagonistas de la película. Michal habla con el chamán, la momia cobra vida durante unos instantes y le dice al antropólogo que su muerte no fue natural, que se debe a la relación que mantenía con una mujer, con lo cual se produce una conexión entre el chamán y la italiana, uniéndose así los 3 elementos fundamentales de la película.














Conforme la relación entre ambos se fortalece, las relaciones con el resto del mundo se deterioran, pocas veces los vemos en compañía de más gente, y las pocas que se ven siempre corresponden al principio de la película, donde ya nos dejan una muestra de lo que más tarde ocurrirá. La italiana es ignorada por los amigos de Michal allá donde vaya, ni tan siquiera se molestan en menospreciarla, simplemente actúan como si nadie hubiera. Ella, por su parte, les dedica una serie de muecas que al fin logran llamar la atención de ellos y del resto de personas que los rodea. 




Michal, en lugar de tratar de integrarla, también la ignora, hasta tal punto es ignorada que decide invitarla a su propia fiesta de compromiso. No sabemos el por qué, tal vez piense presentarla como una amiga, pero no, simplemente la deja a su aire en la fiesta, y ésta termina por robar un par de zapatos y marcharse para sentarse junto a un vagabundo. Así pues, poco a poco, se van aislando del mundo que les rodea, y cada uno se va encerrando en sí mismo para no compartir nada con nadie. Ella parece que reconduce un poco su situación, acepta unas prácticas en una fundición donde se relaciona con más gente y llega a enamorar a un compañero, aunque la "normalización" solo sea una ilusión, pero Michal se deteriora hasta el punto de abandonar a su prometida, su trabajo ... todo, y como consecuencia, numerosos acontecimientos al final del film.


El Chamán habla con Michal durante su delirio



DIOS Y LA MUERTE EN EL UNIVERSO ZULAWSKI


Quien haya disfrutado de alguna película del director polaco habrá caído en la cuenta que de una manera más directa o más indirecta, estos dos temas son habituales y tratados desde diversos puntos de vista. "En el Globo Plateado" nos muestra directamente el nacimiento, o mejor dicho, cómo se convierte alguien en una especie de dios, no lo hace directamente pero las connotaciones son evidentes, igual que en su magnífica "Diabel", el título lo dice todo acerca del significado religioso del film. Szamanka no podía ser una excepción, si bien ambos temas se entrelazan estrechamente en la figura del Chamán. El chamanismo está considerado como religión y como tal, tiene su dios. Durante el delirio de Michal, una frase del Chamán, deja bien claro el punto de vista del director: "Todo dios es un dios de muerte". Aunque sin duda, el dios preferido por Zulawski es el dios cristiano. Hace numerosas referencias a lo largo de la película, los crucifijos se cuentan por docenas. Aunque la mejor prueba de ello es el hermano de Michal, es sacerdote, y en su persona muestra una dualidad que para Michal no es fácil asimilar. 


Michal quiere a su hermano, sobre sus padres no hay grandes referencias y las pocas que hace durante la película no son demasiado buenas, en cambio adora a su hermano, le está agradecido de la ayuda que le prestó y le debe el haberse convertido en una persona respetable. Sin embargo comenta con mucho pesar el hecho que su hermano quiera dejarlo todo, es homosexual y mantiene una relación con un joven, cosa que a Michal no parece gustarle demasiado, no sabemos si por el hecho de ser gay o por querer abandonarlo todo. Un incidente que llama la atención es un accidente ocurrido en la fundición donde la joven realiza las prácticas de la universidad, un hombre queda en el suelo con convulsiones, mientras algunas personas acuden a ayudarlo, el compañero que se enamora de la italiana se queda frente a la imagen de la virgen María rezando ... Acto seguido, la italiana pasa por delante y su cara ocupa el lugar de la virgen en el plano, para después hacer una mueca irrespetuosa frente a la imagen.



Para terminar, destacar en el último tramo de la película el pequeño altar que diseñan en el apartamento, compuesto por fotografías de desnudos y situado sobre el lugar donde practican un sexo cada vez más irracional y más simbólico, aunque muy carnal, no da demasiadas explicaciones del por qué de las posturas adoptadas o del por qué del lugar, aunque sospecho que tiene mucho que ver el chamanismo. Como última referencia religiosa, vemos a Michal vistiendo el alzacuellos de su hermano, tras tomar la decisión de abandonarlo todo y a todos y tras varios sucesos dramáticos que no comentaré por si alguien siente curiosidad por ver la película.






CURIOSIDADES Y DEMÁS TONTERÍAS


Como he comentado al principio de la reseña, el encuentro fortuito, el apartamento en alquiler, y el desenlace sexual me hizo recordar bastante a "El último tango en París", no sabemos si inspiró el guión de  la feminista Manuela Gretkowska. en cualquier caso el resultado es mucho más escandaloso y controvertido, por ello tal vez fue rechazada por la televisión nacional polaca, puesto que iba a ser un telefilm, y fue un absoluto fracaso en su estreno, tanto de público como de crítica. Lo más destacable es la figura de la italiana, cuenta la leyenda que Andrzej Zulawski no hizo casting,  conoció a la protagonista en una cafetería y le ofreció directamente el papel, ella lo rechazó en diversas ocasiones y finalmente aceptó tras varias sesiones de vudú conducidas por el propio director. No es de extrañar que fuera homenaje y despedida, primer y último papel de la bellísima Iwona Petry. 
Pese a la nota en imdb, filmaffinty y demás críticas poniéndola a parir, un servidor la recomienda.

martes, 11 de junio de 2013

EL HOMBRE DEL CRÁNEO RASURADO


Título original: De man die zijn haar kort liet knippen
Año: 1966
Duración: 94 min.
País:  Bélgica
Director: André Delvaux
Guión: André Delvaux & Anna de Pagter (Novela: Johan Daisne)
Música: Frédéric Devreese
Fotografía: Ghislain Cloquet
Reparto: Senne Roufaer, Beata Tyszkiewicz, Hector Camerlunck
 
 
 
SINOPSIS
Un profesor de peluquería se enamora obsesivamente de la enigmática belleza de una alumna. Al ser rechazado por la muchacha, sufre una crisis de enajenación mental: decide raparse la cabeza al cero y evitar todo contacto con el mundo que lo rodea. Su cerebro trastornado tiene una percepción distorsionada de la realidad; vive en un estado de confusión que no le permite distinguir los sueños de la vigilia, la vida de la muerte, el alma del cuerpo.(FILMAFFINITY)**

**Sinopsis que  hizo alguien que no ha visto la película. Eso, o yo no me he enterado de nada.



EL HOMBRE SIN EL CRÁNEO RASURADO


Otra película que hace una declaración de intenciones desde el primer minuto de metraje, como prueba de ello, la primera palabra de la película, Fran. No hay que confundirse, que Fran no es otra cosa que el nombre de nuestra bellísima protagonista femenina y la responsable que el bueno de Govert Miereveld se comporte como se comporta. El primer fotograma de la película es la cara de Govert en esos momentos en que uno comienza a despertarse y no es demasiado consciente de si ya lo está o todavía duerme. Durante esos primeros momentos de confusión, una voz en off (la de nuestro protagonista) repite un nombre sin cesar ... Fran, Fran, Fran. La obsesión tiene nombre de mujer. Se despierta pensando en ella, una joven alumna del centro en el que Govert es profesor.

 









Continúa pronunciando su nombre, es el día de fin de curso, han preparado la entrega de diplomas y actuaciones musicales, Govert es consciente que tal vez sea la última vez que vea a Fran. Quiere hablar con ella, necesita confesarle su amor, pero es un hombre casado y con hijos, de hecho el siguiente nombre que pronuncia es el de su mujer, Corra. Govert siempre se refiere a su mujer de una manera natural, con cariño, con cariño pero sin pasión, la pasión la reserva para su joven alumna. Su hija entra en la habitación donde dormía y le sirve un té. Vemos que es un hombre familiar y respetuoso, un hombre normal y afable.




EN CLASE CON BEATA


Tras la breve introducción y presentación de los protagonistas, el director nos va conduciendo hacia la primera parte de la película, pero antes nos ofrece la que tal vez sea la escena más conocida y reconocible de la película, Gover en la peluquería. Nos hace suponer que es un ambiente en el que se siente cómodo, habla con naturalidad con el peluquero mientras éste le dedica todos los cuidados imaginables en una peluquería de caballeros. Lo vemos realizarle un masaje con una sofisticada máquina (la película es de 1966), quitarle la caspa e impurezas con aire a presión ... Mientras hablan de remedios medicinales naturales y demás cosas, e incluso dios sale en el tema de conversación. Nos da a entender que a Gover le gusta que lo mimen.
 








Finalizado el tratamiento, se dirige al colegio. Su visita a la peluqería y el viaje en autobús lo han retrasado y hace que llegue tarde a la ceremonia de despedida de un compañero que abandona el centro educativo. El dato de la despedida es importante por el hecho que nos da a entender que entre el juez que se despide del colegio (confirma que no es profesor de peluquería como indica la sinopsis) y Gover existe un grado de amistad bastante estrecho, puesto que es el profesor saliente quien propone a Gover como sustituto. En cualquier caso, el aspecto más importante de la escena del colegio, es sin duda porque nos ofrece la imagen de una persona al borde de la desesperación. Lo vemos mirar a la hermosa joven, pidiéndole con el pensamiento que lo mire por última vez, suplicando tan solo un cruce de miradas entre ambos. Vemos como persigue al grupo de chicas con la esperanza de ver a Fran, de poder hablarle por última vez, de hacerle entrega de un libro que lleva consigo y que parece que hay escrita una confesión de amor. La gobernanta del centro frustra todos los intentos de Gover por acercarse a la joven, ha de conformarse con verla cantar en un desafortunado número musical. Y digo desafortunado porque el hiperrealismo de la actuación me llama la atención, puede llegar a ser irritante, el director no corta ni un segundo de la canción interpretada por la joven, se recrea en su imagen y en Gover buscando el mejor ángulo para observarla desde la distancia, consigue hacernos cómplices de la obsesión.


Termina la actuación, y nuestro protagonista es consciente que nunca más volverá a ver a Fran, el curso ha terminado y la joven se irá. Nos ofrece una imagen desoladora de un hombre, vagando por las estancias del colegio, aferrándose a los detalles que le recuerdan a su amor, tocando las cosas que ella ha tocado y retocado un millón de veces durante el curso, se recrea tocando la plaquita del perchero con su nombre grabado y se sienta en su pupitre con aire nostálgico, transmite las sensaciones de un hombre devastado. Llega incluso a decirle adiós, se despide de ella sin haberle confesado sus sentimientos, sabiendo que no la volverá a ver, se da por vencido con un rotundo: "Eras demasiado bella para mí, demasiado inaccesible".





LA VIDA LEJOS DE LA OBSESIÓN


Los presentimientos de Gover estaban en lo cierto, el director da un salto en el tiempo de aproximadamente 10 años, nos presenta a nuestro protagonista con otro empleo, ha renunciado a su puesto como abogado, se ha mudado de casa, y con una vida nueva, mucho más humilde y menos acomodada. No lo dice abiertamente pero parece ser que Gover, consciente de que su obsesión por su alumna no es sana, ha puesto tierra por medio, ha comenzado una nueva vida. Lejos de los antiguos amigos, de compañeros de trabajo, de colegio, de cualquier cosa que pudiera recordarle a Fran. Pese a todo ello, la narración en off sigue hablando de la joven, nos da una breve explicación. Aclara que tras su renuncia, ha comenzado a trabajar como secretario de la Corte, como tal, se ve obligado a asistir a una autopsia, otro de los episodios incómodos de la película. El director se recrea en esa autopsia, no da detalles ni tan siquiera ofrece una sola imagen del cuerpo, aún así, puede resultar desagradable por su longitud y por solidaridad con Gover, que lo pasa realmente mal.



Tras la autopsia, ambos doctores y nuestro protagonista se ven obligados a pernoctar en un hotel de la zona, allí ocurrirá algo que es el verdadero sentido de la película, el reecuentro con Fran. No obstante, merece la pena mencionar y que constata la sensibilidad de nuestro protagonista, así como el mal rato que pasó durante la autopsia. Tal vez sea porque quería estar impecable para su reecuentro con Fran, o bien porque lo que se le quedó pegado al zapato durante la autopsia debió ser algo demasiado desagradable, en cualquier caso, vemos que necesita cambiar los zapatos y sale del hotel a comprarlos, se marcha con ellos puestos, terminando los viejos que llevaba flotando en el río. Todo el espisodio de la compra y del paseo vienen acompañados con las palabras de Fran en la cabeza de Gover, se repite una y otra vez: "Ha dicho hasta luego" queriéndose así convencer que el encuentro fue fortuito pero no el último, que volverán a verse.













EL REENCUENTRO



Llega el episodio más controvertido y el verdadero sentido de la película. Aquí hay muchas consideraciones a tener en cuenta, y supongo que es donde vienen las diversas interpretaciones que he tenido oportunidad de leer sobre la película. Una de las interpretaciones que ha hecho mucha gente es que el encuentro nunca se llega a producir, que es producto de la mente obsesiva de Gover, más aún después de la autopsia y el estrés que debió suponer para él. Tras la autopsia, los doctores pasan el rato discutiendo si el alma humana reside en algún punto físico del cuerpo... Así pues, se podría llegar a pensar que es una crisis nerviosa y el encuentro su consecuencia psicótica. Personalmente no creo que sea así, en mi opinión el encuentro es muy real, se saludan educadamente, Gover reacciona como puede, mezclando la conversación, hablando de manera nerviosa y diciendo cosas que no vienen al caso. Encontramos a Fran convertida en actriz reputada y famosa (Gover jamás lo llegó a mencionar, tal vez porque lo ignoraba) que viaja con su agente.


El encuentro condiciona toda la estancia de Gover en el hotel, y finalmente termina por presentarse en la habitación de Fran en mitad de la noche, Fran lo recibe anormalmente amable y receptiva y comienzan a hablar sobre el pasado. Esa conversación es vital para el devenir de las cosas. Ese diálogo sí puede dar lugar a muchas interpretaciones acerca de la veracidad del encuentro y de los hechos que más tarde acontecen y que no desvelaré.


 EL HOMBRE DEL CRÁNEO RASURADO


Tras el reencuentro, Gover aparece como el título indica, con el cráneo rasurado, recluído en una especie de institución mental, con ropa de recluso. En este tramo final de la película hay varios aspectos a destacar, el más importante, durante una proyección para los reclusos, aparece Fran, y muy llamativamente, aparece vestida de igual manera y en el mismo hotel donde minutos antes había aparecido con Gover. Se supone que es una imagen que pertenece al pasado, y que es completamente ajenos a nuestro protagonista, pero ahí surge la duda más que razonable. Tal vez todo el reencuentro anterior sea producto de la mente enfermiza de Gover, tal vez sea que como parece en un principio sea completamente casual y consecuencia de lo acontecido en el pasado. A mi manera de ver las cosas, el hecho que tenga una interpretación abierta le otorga credibilidad al personaje desequilibrado, y tal vez por eso me haya gustado la película. En cualquier caso y con cualquier interpretación, la consecuencia es que Gover parece que tiene su oportunidad de redención, una oportunidad de ser consciente de lo que ha pasado. Vemos la escena final de la película, son las manos de Gover ensamblando un taburete, "mi pequeña aportación a la casa". Y a destacar, que las últimas palabras vayan dedicadas a Corra, su esposa, parece que cierran el círculo, las primeras de la película van dedicadas a Fran, su amor, las últimas, a Corra, su esposa. Las pronuncia con lágrimas en los ojos, tal vez de arrepentimiento, conocedor de la traición de su corazón a su esposa.






CURIOSIDADES Y DEMÁS TONTERÍAS


La película está basada en la novela Vértigo de Johan Daisne, es una obra totalmente monolagada, así pues la adaptación cinematográfica no debió resultar demasiado sencilla, es un aspecto a tener en cuenta a la hora de valorar la profundidad de los personajes. Si a eso le sumamos que André Delvaux es hijo del Delvaux pintor surrealista, podemos hacernos una idea y saber hasta donde pueden llegar las interpretaciones del film. En un primer momento uno no depara en los detalles, simplemente ve 4 grandes secuencias que componen la pelíscula, bien ordenadas cronológicamente y que cada acto acarrea sus consecuencias, por lo tanto, en un primer visionado puede no haber lugar a interpretaciones. Ahora bien, con un segundo visionado, profundizando un poco más en los detalles, ahí la cosa cambia ... También he leído en diversas críticas la interpretación que tiene cada uno de los actos, tal y como el "efecto analgésico" de la autopsia o el significado de fabricar un mueble con las manos: "El protagonista se deja vencer por un estado catatónico donde lo tangible es refugio y es olvido" (Bloomsday en Filmaffinity)

viernes, 7 de junio de 2013

EL INCINERADOR DE CADÁVERES

FICHA TÉCNICA



Título original: Spalovac Mrtvol
Año: 1969
Duración: 95 min.
País: Checoslovaquia
Director: Juraj Herz
Guión: Juraj Herz, Ladislav Fuks (Novela: Ladislav Fuks)
Música: Zdenek Liska
Fotografía: Stanislav Milota (B&W)
Reparto:, Rudolf Hrušínský, Vlasta Chramostová Jirí Menzel, Ilja Prachar, Jana Stehnová, Milos Vognic
Productora: Filmové Studio Barrandov / Sebor

SINOPSIS

El señor Karel domina a sus familiares, amigos y empleados. Sólo está preocupado porque el tránsito de los difuntos hacia el más allá sea lo más limpio y rápido posible, todo mediante la incineración de cadáveres en el cementerio que regenta. (FILMAFFINITY)




FISONOMÍA DE LA LOCURA

Rara vez una película comienza de una manera tan sorprendente como adictiva, enigmática y transgresora. Una sucesión de primeros planos de una cara, alternados con la piel de un leopardo dentro de una jaula, inquieto, moviéndose de un lado a otro, como si la presencia de nuestro protagonista lo pusiera nervioso. Unos primeros segundos desconcertantes en los que la cámara se pega literalmente a los protagonistas mientras una voz monocorde y sosegada nos cuenta una historia. La voz y la cara pertenecen a Karel Kopfrkingl, el incinerador de cadáveres. El director nos deja claro que no estamos ante la típica película de terror de asesinos en serie y cuchillo en mano. El terror que nos atrapará va mucho más allá de unas manos ensangrentadas y una joven corriendo descalza por el bosque. Es un terror kafkiano, un colosal estudio de la naturaleza humana más retorcida y monstruosa. Durante los primeros segundos, nos habla de la misericordiosa naturaleza, de su bondad y también de dios, con lo que ya nos advierte, ojo, no es un hombre común.
 


La personalidad de Karel queda muy bien definida desde el primer momento, durante la visita al zoo, el director nos presenta de una manera muy sutil a los principales protagonistas de la película. La famila de Karel Kopfrkingl es un verdadero muestrario de rarezas. No nos da detalles sobre ninguno en concreto, pero el silencio casi permanente de la esposa es revelador, se limita a sonreir mientras escucha con devoción a su marido. Sonríe, no sabemos si de felicidad o simplemente porque es a lo que está acostumbrada a hacer permanentemente, sonreir, ver, oir, callar y asentir. Un matrimonio donde la figura dominante es el marido y la mujer es su esposa abnegada. El marido habla del momento que se conocieron, y lo felices que son desde entonces.


El monólogo gira entorno a su persona, su familia, su trabajo ... En ningún momento ningún otro miembro de la familia pronuncia una sola palabra, ni tan siquiera para asentir o para confirmar las palabras de Karel. Habla en plural, de su familia, reitera de lo felices que son, también hace entender lo afotunado que es de haber conocido a su esposa, y parece que se siente culpable de lo poco que ha hecho por ella desde que se casaron, entonces la esposa pronuncia sus primeras palabras, en tono conciliador e indicándole que les va bien, quiere quitarle el sentimiento de culpa a su marido. Karel por su parte se muestra como una persona ambiciosa, una persona que quiere más, que no se conforma con lo que tiene. En un hábil enfoque, parece sugerir que el peso que lleva encima por el cual no ha podido progresar más, son sus hijos. Vemos a Zina y a Mili dentro de una jaula, a lo que su padre comenta con cierta ironía: "Véis hijos, las jaulas son para los animales".



Primeros momentos hablando de su vida, su familia y sus pesares, gira radicalmente la "conversación" y advierte que las cosas van a cambiar, que ha descubierto la forma de aumentar sus ingresos contratando a un vendedor. Parece un detalle sin importancia, pero hay que reparar en el hecho en sí, es una "familia encantadora y decente" (en boca de Karel), se supone que están pasando un día de fiesta agradable, todos juntos y solos, disfrutando de ser esa familia feliz, y de repente, en el zoo, aparece esperando a ser presentado el nuevo ayudante recién contratado. Las connotaciones son evidentes, la familia es una fachada que no le importa en absoluto, tan solo quiere guardar las formas, mejorar las apariencias y prosperar profesional y económicamente. Todo ello sin aparecer los títulos de créditos, se presenta una película apasionante. 


LA MUERTE COMO MEDIO DE VIDA


El título ya indica que el plato fuerte de la película es su protagonista;  la trama, los secundarios, el ambiente, el por qué de las cosas, eso ya son los aderezos que hacen lucir todavía más al cremador. Tras el apasionante comienzo, el director no se guarda nada en el tintero con el ánimo de sorprender o tratando de facilitar un poco la labor de comprensión del espectador. Lo presenta tal y como es, lanzándolo todo al aire sin reservarse nada, nos lo muestra en todo su esplendor. Dos grandes características marcan la personalidad del Sr. Kopfrkingl, que bien podría ser una la consecuencia de la otra: La primera, su ambición desmedida, su afán de progresar, su deseo y su necesidad de destacar por encima de sus semejantes. La segunda, su obsesión por la cremación de cadáveres, como gerente del cementerio, es un verdadero adicto a su trabajo, la necrofilia en su persona es permanente, no diferencia su vida privada de la profesional.


Por tanto, no es casualidad, que la segunda escena de la película sea una fiesta organizada por él mismo con la intención de captar clientes. Lo vemos hablar con su agente comercial, congraciarse con los asistentes, los adula sin remilgos a los clientes potenciales. También vemos algún desprecio hacia aquellos que no encajan en su perfil idóneo. Es clasista, le gusta relacionarse con gente que la concibe como igual, anhela parecerse a la gente que concibe como superior y evita y menosprecia a la gente que concibe inferior. Por todo ello, encuentra en el incipiente nazismo y en su ideología un círculo en el que se siente cómodo. De carácter dominante y autoritario, se empeña en encontrar restos de sangre alemana en su linaje, y tanto es el empeño que pone, que finge encontrarla.




Los gustos de Karel Kopfrkingl son completamente coherentes con su estilo de vida y con su personalidad, se pierde la cuenta de las veces que nombra el Libro Tibetano de los Muertos (Bardo Thodol), que dicho de mala manera, no es otra cosa que una guía para los muertos y los moribundos, según el cual la muerte dura 49 días, tras los cuales sobreviene la reencarnación. Pues bien, las menciones a este libro están diseminadas por todo el film, y es que le obsesiona el tránsito de la muerte al éter, concibe la muerte como una liberación y la cremación como su consecuencia lógica para que ese tránsito sea rápido. Menciona también en diversas ocasiones el tiempo que tarda un cuerpo humano en desintegrarse dentro del horno, sin embargo, y en contraposición a esta fascinación por la muerte, lo trascendental y lo espiritual de ella, es capaz de traducir tales cremaciones a números fríos para optimizar su negocio, por lo que se nos presenta un ser tremendamente complejo e inteligente.


EL NAZISMO COMO LIBERACIÓN


Es fundamental en este caso situar cronológica y geográficamente la película para tratar de entender todo lo que está ocurriendo. Nos hallamos en la  antigua Checoslovaquia, en los albores (más o menos) de los acuerdos de Munich de 1938, esto quiere decir, que muchos de los estados cercanos a una Alemania gobernada por el Partido cedieron a sus consideraciones antes las amenazas de una invasión violenta. Entre esos estados se encuentra la Checoslovaquia de El incinerador de cadáveres. En varias webs he tenido ocasión de leer que el nazismo convirtió al Sr. Kopfrkingl, que lo transformó en una persona diferente, particularmente estoy en desacuerdo. Al principio de la película no se nombra al nazismo como razón de su comportamiento, nuestro protagonista trae sus rarezas de casa. El nazismo no hace si no potenciar tales extravagancias y brotes psicóticos. Le brinda la oportunidad única de deshacerse de toda la gente que le rodea y que él considera inferior, inútil o simplemente le cae mal. Se escuda en su supuesta superioridad para denunciarlos.

El nazismo es como esa mala influencia que te ayuda a tomar la decisión que sabes que está mal y que tu conciencia te grita que no lo hagas. Dada la personalidad de Karel, es perfectamente conocedor de los "defectos" de su familia, se escuda durante años tras una imagen de felicidad y llega el nazismo para abrirle los ojos. El nazismo lo lleva de burdel en burdel, le ofrece la compañía de numerosas jóvenes, le anima a hacerlo, charlan entre ellos mientras las putas se los comen a besos. Karel se deja embriagar por ese ambiente, por la sensación de poder y por la lujuria. Es precisamente en un burdel, donde un miembro del Partido le dice abiertamente que con su mujer nunca podrá prosperar, que al no tener la pureza de la sangre alemana será un lastre, que su afeminado hijo está influenciado por su amigo judío y que corromperá su hogar. A tales afirmaciones, cualquier persona cabal (y supuestamente feliz como tantas veces dice)  hubiera reaccionado a la defensiva, pero Karel no, no hace sino sentirse aliviado por haber encontrado la fuerza que le faltaba para deshacerse de ellos también.


Haciendo un poco de memoria y recordando el principio de la película, parece ser que nuestro protagonista hizo un buen negocio casándose con su mujer, Lákme. Hace referencia a la dote que aportó al matrimonio, y a la ayuda recibida por la madre de ésta, aquella "bendita mujer" como la llama Karel. Si a todo el beneficio que obtuvo le añadimos el carácter reservado, dócil y sumiso que tiene, la convierten en la mujer perfecta para él. Una marioneta a la que manejar a su antojo con la seguridad que no le replicará (recordemos que ella misma se pone la soga al cuello sabiendo que va a morir, ni en esos momentos se enfrenta a su marido). Pese a proclamar su amor por su esposa y por su familia en numerosas ocasiones, se refiere a ellos en muchísimas ocasiones como "sus ángeles", creo que ningún espectador caerá en el error de pensar que realmente los ama. Tremendo ejercicio de Rudolf Hrusínský, ser capaz de transmitir un sentimiento opuesto a lo que su personaje proclama, mérito de un gran actor dirigido magistralmente. 


Llama la atención que tenga que ser un personaje secundario, casi figurante, quien ponga abiertamente en entredicho la sexualidad de su hijo Mili, el joven de 14 años, apocado, tímido, impresionable y de gran hipermetropía. A lo largo de toda la película lo vemos en diferentes situaciones, lo vemos jugando con su hermana en el zoo, lo vemos con el sobrino del médico del que es amigo y del que sospecho se siente atraído y también durante el combate de boxeo, que seguramente lo lleva su padre con la esperanza que descubra la virilidad del deporte y lo único que consigue es que su hijo visite el gimnasio donde entrenan y  guarde en secreto una fotografía del púgil. Aunque sin duda, en la situación que mejor se recuerda es con la tremenda sonrisa que le dedica a un saltimbanqui del parque de atracciones, lo vemos rodeado de atracciones y de gente, sin embargo nada captura mejor su atención que el joven gimnasta.
Zina, la hija de 16 años, parece ser que es el miembro de la familia con una personalidad más convencional, mantiene una relación con un joven que abiertamente se pronuncia en contra del Reich, un personaje por el cual siente una especial aversión, desconocemos si por la relación que mantiene con su hija, por su oposición al nazsimo o  por la pregunta  acerca si algún muerto se había levantado. La transformación de la cara de  Karel al oir semejante estupidez es asombrosa, el hecho que trate de una manera tan frívola la muerte le ha molestado, se le nota, aunque hace alarde de buenas maneras y sale al paso con una educada respuesta.















BROTES PSICÓTICOS

En esta película sucede lo contrario a lo habitual, es decir, normalmente cuesta identificar los comportamientos anormales de los aquejados por alguna enfermedad mental, las cosas que hacen, las cosas que dicen o su manera de vivir o de vestir suelen dar alguna que otra pista sobre el terreno sobre el que pisamos, en el incinerador de cadáveres ocurre lo contrario, es tremendamente difícil encontrar un comportamiento, una frase, una mueca que no de señales que el protagonista está desequilibrado. Comenzando por lo que comentaba antes, su gran afición a leer y releer el Libro Tibetano de los Muertos, no ocurriría nada si el protagonista lo mencionara de manera circunstancial, pero cuando el protagonista se dedica a la cremación de cuerpos y lo nombra en numerosas ocasiones ya es como para salir corriendo.  Ocurre de la misma manera que con su amistad con el médico, habitualmente alguien puede tener un amigo médico al que va a visitar de vez en cuando y a hacerse analíticas, nuestro protagonista recorre el camino en sentido contrario, de tanto acudir al médico a hacerse análisis de sangre a la busca y captura de la gota alemana llega a entablar amistad con él. A su favor podemos decir que es vecino suyo y que su hijo y el sobrino del médico comparten juegos, pero en cualquier caso, y tal y como reconoce el propio Kopfrkingl, es un hipocondríaco, obsesionado en mantener alejada de infecciones su supuesta sangre alemana.

Extracción de sangre en primer plano. ¿Tal vez inspiró a Quentin Tarantino para su Pulp Fiction?

La música es otra de las pasiones de Karel, llega a afirmar que si a alguien le gusta la buena música no puede ser mala persona, tal vez esta sea ésta la afición más convencional, no obstante, siempre que alguien entra en el crematorio para no salir, suena  la misma música, que sintoniza él mismo, con lo cual ya queda asociada a un comportamiento perturbado. La música está presente a lo largo de toda la película, desde la fiesta del princpio donde contrata una pequeña orquesta, pasando por el solista del que Karel prácticamente se enamora de su "maravillosa voz". También conviene destacar que en los directores de la Nueva Ola Checa la música está muy presente en todas sus películas.














Una "prueba" de su enfermedad de la que no termino de estar muy seguro son las visiones que sufre a lo largo de la película. No tanto por lo que ve, si no porque no se alcanza a diferenciar si son visiones que sufre el propio Karel o son una serie de incisos que el director hace deliberadamente para ponernos alerta. Tales visiones comprenden desde la hermosa joven entulada, que bien podría evocar a su propia esposa cuando era más joven puesto que lucen el mismo peinado hasta sí mismo con otra ropa (batín) y en su casa. En cualquier caso, cuando aparecen con la música de fondo no hacen si no enfatizar el desequilibrio y el proceso de psicosis que está viviendo Kopfrkingl. Ocurre algo parecido a la hora de hablar en público, tras el micrófono lo vemos hablar entredientes, casi susurrando al principio hablando de su persona y de los acontencimientos, para acabar adorando a Hitler y vociferando "¡Hail!" en el propio funeral de su esposa.




Llegamos al síntoma que mejor muestra el desequilibrio de Kopfrkingl, algo que por mucha explicación que trate de darse no puede interpretarse como algo normal ni circunstancial. Desde tiempo atrás ha habido muchos hombres que han mostrado en la gran pantalla su afición a mantener en perfecto estado su peinado. Ahora bien, nuestro protagonista lleva tal obsesión a un punto enfermizo, siempre que la muerte está cerca, como un acto reflejo, saca el pequeño peine de su bolsillo, lo pasa por la cabeza del cadáver y luego por la suya propia para devolverlo más tarde a su bolsillo. En varios casos sucede así en el mismo crematorio, con el cuerpo en el ataúd, donde aleccioina a su ayudante mientras peina el cadáver y su cabeza. También tenemos el peinado del mal augurio, Karel susurra alguna parrafada sobre el sentido de la vida, de la liberación que supone la muerte, de la necesidad que los sufridores sienten de ser salvados ... Entonces vemos a Karel  pasar el peine  (la mano en un par de ocasiones)  por la cabeza de su interlocutor , les clava la mirada y por su expresión facial  parece que está viendo a esa misma persona dentro del ataúd esperando su turno en el horno.















MARCANDO DIFERENCIAS



Partiendo del hecho que el personaje de  Karel Kopfrkingl ya se basta y se sobra para llenar una película y hacerla interesantísima por lo complejo del personaje y por la magnífica interpretación, ¿Qué hace del incinerador un peliculón? Para mí, la clave está en dos grandes aspectos. Uno: Los personajes secundarios, todo un abanico de personajes peculiares que marcan diferencias y que tienen una historia que contar, en muchas ocasiones sin tener demasiado que ver con el grueso de la película, y que tal vez por eso los haga tan interesantes. Aportan vida y credibilidad a la figura principal, generan un entorno en el que el cremador no se siente extraño. Además de la familia y el médico que ya he comentado antes, el centro de atención debe ponerse en el crematorio, ese lugar está plagado de personajes peculiares, el primero en ser presentado es el agente comercial, el Sr. Strauss, el hombre de las mil reverencias ...hoy día llama la atención que un crematorio necesite vender sus servicios de igual manera que quien vende una televisión, pero hay que ponerse en la época donde acontece la película. Alrededor de los años 40 no era una práctica demasiado habitual y había que darla a conocer. 
Otro personaje muy particular, trabajador encargado de las labores de mantenimiento del crematorio, el Sr. Pelikan (gran nombre), un adicto a la morfina que persigue a nuestro protagonista, conocedor de su amistad con el Doctor, le ofrece regalos a cambio de dosis de morfina con las que saciar su necesidad. Le habla en susurros y casi sobresalta más que otra cosa. Le ofrece un cuadro con moscas de sarcófago, típicas de los cadáveres en descomposición, a lo que Karel se apresura a colgar en su casa para "hacerlo más bello" (episodio ampliado aqui

 









Aunque sin duda el personaje secundario por excelencia es el ayudante de Kopfrkingl, un joven Jirì Menzel que da vida a Dvorák. Reputadísimo actor y director de cine, particularmente lo prefiero detrás de las cámaras, a él le debemos grandes joyas del cine checo, tales como Trenes rigurosamente vigilados, Un verano caprichoso, Yo serví al Rey de Inglaterra ... Un sin fín de grandes títulos a cada cual más apetecible. Como ayudante del cremador, interpreta a la perfección a un ayudante que no sabe muy bien si debería estar allí, parece que su profesión sea algo provisional, como quien acepta un trabajo esperando algo mejor. Trata de pasar los malos tragos fumando sin parar, fuma muchísimo, tanto que hasta Karel parece preocupado por ese detalle.
Es obligado a observar por una ventanita cómo se desintegran los cuerpos mientras su jefe le sostiene la cabeza por la nuca, un gesto que se repite en diversas ocasiones y que no augura nada bueno. Y sin llegar a ser considerados personajes secundarios, debemos mencionar y destacar al matrimonio fuera de lugar. Aparecen en la fiesta del pricnpio, en el parque de atracciones, en el funeral de Lákme ... Siempre rompen el silencio, discuten, el marido recrimina a su mujer en tono cómico. Sin duda representa a la perfección la segunda razón por la que el incinerador es un peliculón: La innovación.
 

Tiene todos los ingredientes del cine que nació de la Primavera de Praga, antes nos hemos referido a la presencia musical a lo largo de todo el film, tiene unos personajes elaboradísimos donde nada sobra y nadie falta. Un sentido del humor tan refinado como negro y una serie de malabares que hacen las delicias del espectador. Unos juegos de cámara a los que todavía no estábamos muy acostumbrados (aunque ya había muy buenos ejemplos dentro de nuestro país) a princpios de los '70. Recordemos que la cinta nos llegó a España porque fue la ganadora del Festival de Sitges a la mejor película, al mejor actor (Rudolf Hrušínský) y a la mejor fotografía (Stanislav Milota) allá por el año 1972, aunque la fecha de producción sea 1969, y que aún hoy siguen sorprendiendo.


Varios aspectos técnicos llaman la atención, como por ejemplo los cambios de escena. Espectaculares los recursos del director en este aspecto, el tránsito de una escena a otra son una maravilla, en el parque de atracciones vemos a Kopfrkingl visitando las paradas, hablando con esa voz profunda y monocorde, lo vemos admirar a monstruos dentro de tarros de cristal, comienza a levantarse la manga de la camisa mientras comienza a lanzar una pregunta al médico, la cámara continúa en el parque de atracciones, se queda rezagada de la acción, comienza a acercarse hacia el brazo desnudo para dejarlo en primer plano y cuando éste se abre, aparece la consulta del doctor, fantástico. O en casas de putas, vemos al protagonista en calzoncillos, mostrándole a la meretriz la caja de bichos que le ha regalado el Sr. Pelikan, pasa a un primer plano de la caja para abrirlo después y mostrarnos cómo lo cuelga de la pared del salón de su casa. 

 











Un recurso muy habitual en la película también son los llamados "ojo de pez", planos tomados desde más altura y donde se produce una ligera deformación de las figuras, consiguiendo un efecto mirilla. Al igual que los primeros planos, un recurso muy frecuente y que produce un efecto acorde con la personalidad del protagonista y alma de la película, de desequilibrio, de anormalidad, entendida como fuera de la norma común.

















CURIOSIDADES Y DEMÁS TONTERÍAS



Al hilo de lo comentado en el apartado anterior sobre  los primeros planos,  me recordó a otra fantástica película de Carlos Saura de 1965, La Caza. Un abuso del primer plano que hace caer en desasosiego al espectador y que lo hace sentirse como los propios protagonistas de la película. Son dos claros ejemplos en los que el montaje de la película es fundamental para que adquiera el significado que el director quiere transmitir al espectador. En La Caza se lo debemos al grandísimo Pablo García del Amo y el montaje del Incinerador es gracias a la tremenda labor de Jaromír Janácek.
Como la mayor curiosidad o dato chocante que he tenido viendo la película, ha sido el misterio de las gafas ... Tres personajes las utilizan, Karel las utiliza como gafa de cerca, únicamente se las pone para leer, Dvórak (Jirí Menzel) y Milli las utilizan siempre, tan solo se las quitan cuando están nerviosos o para limpiarlas. Ahora bien, en ningún plano de la película coinciden dos de esos tres personajes con ellas puestas, y es que mirándolas detenidamente, parece que son la misma gafa y se las intercambian para rodar cada escena. ¿Falta de presupuesto? ¿Algún significado especial? No lo sabemos, eso sí, resulta chocante.
 

Por último, hacer la mejor de las recomendaciones a esta fantástica película, quien sienta curiosidad por ella, puede disfrutar de ella en VOSE aqui